1588 - 1590

Nueva entrega de Juan Luis Sánchez sobre transcripciones de documentos relativos a antiguas familias berlanguesas. 

1588

Pruebas para la concesión del Título de Caballero de la Orden de Santiago de Melchor de Brizuela y de Saravia, natural de Berlanga, 1588. OM-CABALLEROS_SANTIAGO,Exp.1255

Berlanga, 4 de febrero de 1588. Informantes: Hernando de Ovando, caballero de la dicha Orden de Santiago y el Ldº Juan Ramírez, religioso de la misma.

1 (4.II) MIGUEL DE GALBA, vecino, de 80 años. FIRMA 

2 (dd) PEDRO LOPEZ, vecino, natural de un lugar ilegible, a una legua de Berlanga. FIRMA 

3 (5.II)  PEDRO DE OLARTE, [natural de Luyando, Álava] vecino, de 76 años. FIRMA 

4 (dd) PEDRO DE RETORTILLO EL VIEJO, vecino, de 67 años. NO SUPO FIRMAR 

5 (dd) ALONSO RUIZ, vecino [natural de Berlanga], de 60 años. FIRMA.

6 (dd) ANDRES DE BAIDES, vecino, de 70 años. NO SUPO FIRMAR.

7 (6.II) SEBASTIAN DEL MOLINO, vecino y natural,  de 55 años.  FIRMA. 

8 (dd) JOANES DE BENITO FLORES, canónigo de la Colegial, [natural de Alpanseque] vecino, de 61 años.  FIRMA. 

9 (dd) JUAN DEL CASTILLO, racionero de la Colegial, vecino, de 60 años. FIRMA.

10 (dd) DOMINGO DE ALCUBILLA, [clérigo presbítero] vecino [y natural],  de 56 años. FIRMA

11 (7.II) FRANCISCO DE BINEGRA, vecino, de 70 años. NO SUPO FIRMAR. 

12 (8.II) PEDRO MUÑOZ, vecino de La Cabreriza, jurisdicción de esta villa y a una legua de ella, de 70 años. NO SUPO FIRMAR. 

13 (dd) JUAN DE CONCHA, clérigo y racionero de la Colegial, vecino [y natural de Berlnaga], de 48 años. FIRMA. 

14 (dd) DON DIEGO DE ISLA,  alcaide de la fortaleza, vecino [y natural de Berlanga], de 70 años de edad, primo segundo de parte de madre del pretendiente. FIRMA.

15 (dd) MIGUEL DE AGUILERA, clérigo, vecino, de 55 años. FIRMA

16 (dd) ALONSO DE GUZMAN, vecino [natural de Auñón], de 76 años. FIRMA.

17 (dd) PEDRO ROZILLA, vecino, [natural de la Montaña, Burgos] de 60 años, FIRMA.

18 (10.II) JUAN DEAL, vecino, 55 años. NO FIRMA. Último testigo interrogado en Berlanga. El mismo dia los informantes partieron hacia Pontedei, en el Valle de Valdevecana (Montañas de Burgos), adonde llegaron el dia 17.

1590

Pruebas para la concesión del Título de Caballero de la Orden de Santiago de Bernardino de Velasco y Guzmán (AHN, SANTIAGO, Exp.8677). 

PADRES: El Condestable D. Iñigo de Velasco y Guzman, natural de Berlanga, y doña Ana de Velasco y Aragón, Duquesa de Frias, natural de San Lucar de Barrameda, que vivió en Berlanga. 
ABUELOS PATERNOS: Don Juan de Tovar, marqués de Berlanga, natural de ella, y doña Juana Enriquez, natural de Sevilla, que vivió en Berlanga. 
ABUELOS MATERNOS: Juan Alonso de Guzmán, Duque de Medina Sidonia, natural de San Lucar de Barrameda, y doña Ana de Aragón, duquesa de Medina Sidonia, que nació en Zaragoza y vivió en San Lucar. 
Madrid, 10 de enero de 1590. Informantes: Fernando de Ovando, caballero de la Orden, y el Ldº Alonso Sanchez, religioso.

1º (22.II.1590) DON IÑIGO DE BRIZUELA, de 60 años, vecino y natural, conoce al pretendiente, que  será de 21 años. Suspadres se casaron en 1552, por el mes de mayo. FIRMA

2º (dicho dia), PEDRO ROZILLA, de 60 años, natural de la Montaña, pero que ha más de 45 años que vive en esta villa. FIRMA

3º (dd) PEDRO DE OLARTE EL MAYOR, de 78 años, [natural de Luyando, Álava] vecino de Berlanga de 58 años a esta parte. FIRMA

4º (dd) JOANES DE BENITO, de 63 años, canónigo de la Colegial, natural de un lugar a 4 leguas de Berlanga que se llama Alpanseque, pero ha 40 años que vive aqui. FIRMA

5º (dd) JUAN DE ALMENARA, de 70 años, racionero, natural de Toro, pero vive aqui hace 56 años. FIRMA

6º  (23.II) JUAN RODRIGUEZ, vecino y natural, de 75 años. FIRMA

7º (dd) DOMINGO DE ALCUBILLA, de 58 años, clérigo presbítero, vecino y natural, FIRMA.

8º (dd) JUAN DE CONCHA, de 50 años, racionero de mayor ración de esta villa, vecino y natural,  FIRMA

9º (dd) ALONSO DE GUZMAN, de cerca de 80 años, natural de Auñon, vecino de esta villa de mas de 40 años a esta parte. FIRMA 

10º (dd) ALONSO RUIZ, de 62 años, vecino y natural. FIRMA.

11º (24.II) JUAN DEL CASTILLO, de 62 años, racionero de la Colegial. Fue criado de don Iñigo de Velasco, pero al presente no lo es. FIRMA. [Uno homónimo fue canónigo magistral de Cuenca y murió electo Obispo de Calahorra en 1613; puede tratarse del mismo]

12º (dd) PEDRO GOMEZ, de 60 años, vecino y natural.  NO SABE FIRMAR.

13º (dd) AGUSTIN MAJUELO, de 55 años, vecino y natural. FIRMA.

14 (22.II), JUAN BAPTISTA RUGGERO, canónigo de la colegial, de 60 años. FIRMA (último testigo interrogado en Berlanga).

* * *

En los dos interrogatorios, ambos dirigidos por el mismo caballero jacobeo, fueron examinados 32 testigos, 8 de los cuales repitieron en las dos probanzas. Por lo tanto, nos queda un elenco de 24 residentes en Berlanga, de los que hay que descontar a los religiosos de la Colegiata, por lo común foráneos, que al no casar, no arraigaban familiarmente en la villa. Solo uno de ellos, Juan de la Concha, que se dice el racionero de mayor ración (renta) en dicha Colegiata, era natural de ella. Con él, nos quedarían 25, pero enseguida notamos que uno de los deponentes del primer interrogatorio, Pedro Muñoz, estaba avencidado en La Cabreriza, quedando finalmente 24.  De ellos, 2 hidalgos (Iñigo de Brizuela y Diego de Isla) y el resto de los entonces llamados «hombres buenos y llanos pecheros». A decir verdad había otro hidalgo, aunque no reconocido en Berlanga como tal. Se trata de Pedro de Olarte, natural de Luyando, «en la tierra de Ayala, hermandad de Álava», hijo y nieto de hidalgos por vía paterna (Juan y Diego de Ayo, respectivamente). Segundón de su casa, se marchó a Berlanga mozo, según los testigos que presentó en el pleito. Él dice que llegó a Berlanga en 1532; es decir, con 20 años. Existe de aquel una ejecutoria que leí parcialmente. Hasta donde llegué, debería de haber conseguido tal reconocimiento porque los testigos aportados, de Luyando y Ayo, todos hijosdalgo alaveses, afirmaban indubitablemente su hidalguía, mientras que el Concejo de Berlanga, que no se opuso a la demanda en tiempo y forma, siendo declarado en rebeldía, solo esgrimía generalidades sin fuerza probatoria. Pero lo cierto es que no se le trata de Don en ninguno de los interrogatorios. Su hijo y nieto se llamaron como él. Este último murió jóven, dejando viuda a una tal María Llorente, vecina de Berlanga, que en 1615 pleiteó en nombre de su hijo, otro Pedro de Olarte, bisnieto del que aquí se trata, menor de edad, por un mayorazgo y patronato fundado por un pariente clérigo, de apellido Lopez, en el lugar de Morales.

Instrucción básica. De los dichos 24 testigos, solo 4 no supieron firmar, con lo cual  el porcentaje de alfabetización en Berlanga, entre la población de mayor edad de la villa (que era el segmento o población objetivo de los informantes), arrojaba un 83,34 %, un valor que, más que alto para la época, bien puede ponderarse de estratosférico o sideral, sobre todo considerando la edad de los encuestados y la alta representatividad de la muestra entre la población de mayor edad de la villa. Y máxime, considerando que hemos desgajado de ellos a los residentes más letrados; es decir, a los religiosos de la Colegiata, también vecinos de Berlanga.

Inmigración. La primera probanza de Don Hernando de Ovando es lamentable, porque no aclara el origen de los interrogados cuando éstos no eran naturales de Berlanga. En tal caso, y como se hace en la segunda probanza, debía consignarse la procedencia del deponente y la antigüedad de su afincamiento en la villa, porque de poco valía la ancianidad si el testigo no había convivido suficientemente con el sujeto tratado en el interrogatorio.  Debido a esta torpeza o lapsus, se nos escamotea la información sobre la naturaleza original de apellidos tan infrecuentes como GALBA y DEAL (éste último valenciano), pero también los RUIZ, ALCUBILLA, BINEGRA (o VINIEGRA) y RETORTILLO. Cierto que los tres últimos son toponímicos sorianos, que revelan la cercanía de su orígen, pero nada nos dice de la fecha de su posible asentamiento en la villa. En todo caso, los Retortillo de Berlanga lograrían el reconocimiento de hidalguía a finales del siglo XVII y gozaron de hábitos jacobeos. 

Descontando a estos 6 vecinos, de los cuales ignoramos su naturaleza, nos queda un panel de 16 filiaciones completas.  Doce de ellos, naturales de Berlanga y el resto, establecidos en ella en vida de los interrogados, que procedían de: 1) un lugar ilegible, a una legua de Berlanga; 2) Auñón; 3) Las montañas de Burgos; 4) Luyando (Álava). Aunque la muestra pierda representatividad, tanto por su cortedad  como por su segmentación, el valor obtenido (25% de población inmigrante) no es incongruente con el crecimiento y la pujanza económica apreciables de Berlanga desde la segunda mitad del siglo XVI. En 1565, el Marqués de Berlanga quiso imponer a sus vasallos un aumento superior  al 300% en la recaudación de las alcábalas (el IVA de entonces). La villa recurrió esta disposición, pero las deposiciones testificales de mercaderes y tratantes, todos ellos de lugares de su término, demostraron que la riqueza que generaba la villa era tal que no podía dudarse que, a pesar de la subida (o subidón), el Marqués les perdonaba dinero, porque el nuevo reparto equivalía al 7% u 8% de las transaciones mercantiles, cuando el máximo tipo imponible era entonces, para dicho impuesto, el 10%..